Jesús sigue en la región de Galilea y se encuentra con sus discípulos en la localidad pesquera de Cafarnaún, junto al lago Tiberíades. Allí solían ir periódicamente como lugar de descanso y para pasar unos días. El relato de hoy sucede en la sinagoga, edificio de oración al que acudían los judíos, especialmente el sábado, para escuchar y meditar la Sagrada Escritura y sus enseñanzas.