Lucas 21, 25-28. 34-36
Inauguramos el nuevo Año Litúrgico, correspondiente al ciclo “C”, con el comienzo del tiempo de Adviento, con el que la Iglesia nos invita a prepararnos interiormente a la celebración de la conmemoración del Nacimiento del Señor, cuya venida tuvo lugar hace más de veinte siglos, y con la misma actitud cristiana que debemos tener en nuestro presente mientras esperamos la segunda venida del Señor por él anunciada, porque toda nuestra vida es un continuo Adviento.